Cuando Jesús dijo, “YO SOY” la Resurrección y la Vida” [Juan 11:25], pronunció una de las declaraciones más poderosas que se pueden hacer. Al decir “YO SOY”, Jesús no se refería a la expresión externa, sino a la Magna Presencia Maestra – a Dios en lo interno, porque repetidamente decía, “Yo por cuenta propia no puedo hacer nada. Es el Padre que mora en mí – el “YO SOY” – quien hace las obras” [Juan 14:10].
Mediante el constante uso de la afirmación de Jesús, “YO SOY” la Resurrección y la Vida...”, puedes ajustar todo en tu experiencia diaria, y llevarlo todo al Orden Divino perfecto. Cuando un individuo piensa, siente, escribe o pronuncia las palabras “YO SOY”, inmediatamente recibe la atención de la vida dentro de él, así como también a su alrededor. ¿Por qué? Pues, porque las palabras “YO SOY” constituyen la señal a la vida inteligente de crear.
El éxito último del ministerio de Jesús fue el uso constante y profundamente sentido de la sencilla afirmación, “YO SOY” la Resurrección y la Vida de Mi Plan Divino, físicamente manifestado aquí y ahora”.
También dijo Jesús, “YO SOY” el Camino, la Verdad y la Vida” [Juan 14:6], dándole reconocimiento al Único Poder – Dios en Acción dentro de él.
Dijo igualmente, “YO SOY” la Luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas” [Juan 8:12], comenzando cada afirmación de vital importancia con las palabras “YO SOY”.
El contemplar del “YO SOY” como todo aquello que desees ser es uno de los medios más poderosos de liberar el Poder, el Amor, la Sabiduría y la Verdad de Dios que tienes en tu interior, y ponerlos en acción en la experiencia externa.
Libro: sendero de Luz - serapisbey.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario