La atención es similar a un rayo de energía eléctrica dirigido a cierta longitud de onda, que se conecta con un objetivo que está vibrando a la misma longitud de onda.
La atención es la emisión de una corriente consciente de chispas electrónicas que forman un puente o conductor conformado por la propia vida del emisor, a través del cual fluye hacia este (en una corriente de regreso) la sustancia, la radiación y la cualidad hacia la cual dirigió dicha atención. La atención es tan científica como lo es el rayo eléctrico creado mediante el sistema Marconi o un transmisor de radio. La atención es la Vida propia proyectada hacia adelante a través de la acción auto-consciente dentro del Universo para unirse con el objeto hacia el cual la atención ha sido dirigida. Incontables afirmaciones y alocuciones apuntan hacia el poder que está contenido dentro de la atención y, sin embargo, de las actividades del hombre, la atención es la que menos se controla.
Libro: Sendero de Luz
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